Hoy pudiera ser una noche tan normal como cualquier otra, sin embargo tengo que confesar que hay motivos para sentirme diferente y es algo que no puedo describir, es una sensación contraria al vacío, es cuando parece que el sol te ilumina sólo a ti y que prevalecen razones para continuar viviendo en este pequeño globo del universo a pesar de todas las contradicciones existentes. Cuando parecía que el cielo era gris, empecé a buscar entre mil recuerdos la ocasión para fabricar un sueño que me pudiera iluminar, luché muchas noches sin conseguirlo, aunque sabía que en esta inmensidad existirían seres preciosos, pero nunca tuve un don mágico que me permitiera encontrarlos. De la nada apareciste Tú, sin decir nada, ni siquiera tus ojos pude ver, no te esperaba, sólo sentía, sólo sentía… sin pensar una voz interior me llamó a tu lado, así sabría que eras mía, ¿ pero cómo decirlo? ¿Cuándo no se ha dicho nada?.. Impregné mi sentimiento con el tuyo y me lo llevé a casa, ahí tuve la sensación de tener un sueño sideral donde yo era tan pequeño, pero entre millones y millones de estrellas brillabas tú. La luz era especial irradiaba tonos azulados… …y yo tan cuerdo me decía: es sólo tu sueño despertarás mañana y diferente será…Sin embargo, no la pude olvidar, es más, sentía que me llamaba, sentía que al raspar ese sentimiento mi corazón se limpiaban viejas heridas quizá imposibles de borrar. Ahora estás aquí, eres real porque vives en mí, respiras mi aire, te puedo acariciar con tan sólo desear, respiras agitado, compartimos el dolor, reímos y volvemos a vivir. Estás aquí, existes y sé que no eres un sueño, aunque te veo en ellos, porque desde siempre habías sido, aún sin encontrarte, parte de mi ser… .
El despertar de una nuevo día donde las reflexiones nos llevan a un mismo camino, no hay situaciones difíciles de comprender, que las líneas de tus labios pudieran pronunciar.
Vivo Razón Inesperada 